Julio Ibarra se impone como alcalde de Pichilemu. Así lo confirman los analistas electorales de la región. Una encuesta que circula profusamente en partidos de centro Izquierda y una medición realizada por el gobierno, coinciden con los “expertos” locales en describir un escenario con un muy holgado triunfo del candidato independiente.
De acuerdo a esto y como ya es costumbre en estos casos, los pronósticos apuntan a que la gran batalla electoral y las “sorpresas” se darán en la composición del Concejo Municipal.
Julio Ibarra, ¿desde cuando?
Julio Ibarra registra una historia personal en la comuna que se inicia con su designación como gobernador y que se ha proyectado por casi más de una década. Su elección como alcalde, reporta un desafío para los partidos políticos tradicionales que sufrirían el castigo de no adaptarse a las nuevas demandas del electorado.
Como se sabe, el panorama eleccionario en Pichilemu cambió al momento en que el actual alcalde, Roberto Córdova, no consigue impugnar la sentencia del Tribunal Calificador de Elecciones declarándose que no podría llevar su candidatura por un cuarto periodo.
Córdova es una figura potente para Pichilemu. Se le critica que dejó de lado el ámbito turístico que es la principal actividad económica del territorio. Igualmente se sabe que su “delfín” es el cuestionado candidato Cristian Pozo, quien se inscribió para ser el sucesor natural del alcalde. Las críticas en este orden señalan que la intención de traspasar el cargo entre Roberto Córdova y Pozo, va en desmedro de una renovación política que pueda beneficiar el desarrollo comunal. Al cierre de esta edición, no se lograba dilucidar si Pozo era segundo o tercero en los pronósticos.
En la derecha las cosas tampoco se ven claras. El actual concejal Pablo Martínez, y el independiente (pro derecha) Marcelo Cabrera no superarían los mil quinientos votos. En los sectores del oficialismo no reconocen merito en la campaña de Cabrera. Es más, apuntan a la sanción moral de los electores debido a su condena en la justicia por fraude al fisco que le afecto en 2008 cuando ejerció como alcalde.
Del resto de los aspirantes a jefe comunal, se apunta a que el independiente, Jorge Urzúa, puede tener ventaja por sobre el candidato del partido comunista, Manuel Cofré, y el director del liceo municipal, Hipólito Solano.
En cuanto a la elección de concejales, la contienda se coloca interesante debido a que del total de 36 candidatos, hay dos que pueden superar en votos al actual edil UDI que busca su tercer periodo, Hugo Toro. Una de ellas es Lucila Polanco, comerciante de la tienda de ropa “Lutty”, quien va como independiente en el listado de Evópoli. Otro de los mejores aspectados y potencialmente elegido es el candidato DC y actual presidente de la Cámara de Turismo Danilo Robles.
Definitivamente, en Pichilemu vienen muchos cambios, tanto en el sillón alcaldicio como en el cuerpo de concejales. Ojala que todos estos cambios sean para el mejor futuro de la comuna.